Si usted no es cristiano, es decir, si NO ha nacido de nuevo, si NO conoce a Cristo personalmente, si NO ha aceptado la expiación de Cristo por sus pecados, es inútil que proceda con esta prueba hasta que haya cumplido con este requisito. Porque nada de lo que eres o lo que haces puede contar con Dios a menos que hayas aceptado a Su Hijo como tu Salvador (Juan 3:3; Mateo 7:21-23). Pero él desea que lo recibas.
Si ERES cristiano, revisa tu respuesta a cada una de las cincuenta preguntas. Luego pase al final de esta lista y compare sus respuestas con lo que la Biblia enseña sobre los mismos temas. Cada respuesta correcta cuenta dos puntos. Ahora, ¿cuál es tu calificación?
¿Qué tan buen cristiano eres?
Responde a estas preguntas y califícate
1. Te llamas cristiano…
a. ¿Porque te has unido a la iglesia?
b. ¿Porque guardas la regla de oro y los diez mandamientos?
c. ¿Porque conoces personalmente a Jesucristo y estás en comunión con él?
2. En cuanto a tu actitud hacia Dios…
a. ¿Está él fuera de tu vida personal, como el presidente de tu país?
b. ¿Sientes la compulsión de respetarlo y obedecerlo?
c. ¿Lo amas con todo tu corazón, alma y mente?
3. Crees que eres salvo…
a. ¿Porque vives una vida piadosa?
b. ¿Porque has cumplido las condiciones en las que Dios prometió salvarte?
c. ¿Porque crees que Dios sería demasiado misericordioso para dejar que te pierdas?
4. En cuanto a la certeza de su salvación…
a. ¿Sabes positivamente que eres salvo?
b. ¿Solo esperas que seas salvo?
c. ¿Crees que tus posibilidades de salvación son tan buenas como las de la mayoría de las personas?
5. ¿Cuál es su actitud hacia los cristianos en general…
a. ¿Eres indiferente al bienestar de aquellos que no conoces?
b. ¿Te gustan algunos miembros de la iglesia, pero detestas a otros?
c. ¿Amas a todos los discípulos de Cristo sin excepción?
6. A la hora de decidir lo que es correcto hacer…
a. ¿Eliges lo que no hiere tu conciencia?
b. ¿Eliges lo que te resultará más provechoso?
c. ¿Encuentras que lo que dice la Biblia es correcto y lo haces?
7. En cuanto a las Escrituras…
a. ¿Crees que son en gran parte folclore judío?
b. ¿Crees que la Biblia es en parte la Palabra de Dios?
c. ¿Crees que la Biblia es la Palabra de Dios?
8. En cuanto al conocimiento de la Biblia, piensas…
a. ¿Que Dios no te exigirá que guardes mandamientos que no conoces?
b. ¿Que unos pocos pasajes bien elegidos son todo lo que realmente necesitas?
c. ¿Que toda la Biblia tiene un propósito definido en tu vida, por lo que realmente estás tratando de conocerlo?
9. Asistes a los cultos de la iglesia principalmente…
a. ¿Para adorar a Dios y acercarte a Él?
b. ¿Para aumentar tu vida social y tu posición?
c. ¿Para guardar el día del Señor y ser entretenido?
10. Sirves en la iglesia…
a. ¿Porque se espera de ti?
b. ¿Porque te da una sensación de deber cumplido?
c. ¿Porque amas el reino de Cristo y quieres avanzar en él?
11. Cuando participas en los cantos de la iglesia…
a. ¿Lo haces solo porque te gusta cantar?
b. ¿Le cantas al Señor?
c. ¿Cantas para ponerte de humor para el sermón?
12. Cuando sientes que Dios quiere que hagas algo…
a. ¿Lo haces alegremente de una vez?
b. ¿Obedeces a veces y a veces ignoras sus deseos?
c. ¿Lo consideras cuidadosamente y luego haces lo que te atrae?
13. Cuando la tarea religiosa que se te ha asignado es pequeña…
a. ¿No sientes una gran obligación de hacerlo?
b. ¿Se lo pasas a otra persona?
c. ¿Lo haces con todo tu corazón?
14. Amas a alguna persona en la tierra…
a. ¿Por encima de todo lo demás en la existencia?
b. ¿Tanto como cualquier otra cosa existente?
c. Cuanto sea, ¿siempre amando más a Dios?
15. Cuando se trata de diezmos y ofrendas…
a. ¿Te escondes detrás de nuestro estar “bajo la gracia” y das menos de lo que darías “bajo la ley”?
b. ¿Pagas alegremente al menos un diezmo al Señor?
c. ¿Cuentas como “al Señor” lo que haces por organizaciones cívicas, familiares y para pagar ciertas obligaciones sociales?
16. Como lo demuestra lo que gastas, que es lo más importante…
a. ¿Tus diversiones y lectura recreativa?
b. ¿Tu automóvil y aseo personal?
c. ¿Las personas aún no alcanzadas por quienes Jesús murió para salvar?
17. En cuanto a tu vida de oración, hay días…
a. ¿Cuando no tienes tiempo para estar en comunión con Dios?
b. ¿Cuando sientes que no puedes orar?
c. ¿Estás siempre en espíritu de oración?
18. En cuanto a los libros de profecía en la Biblia…
a. ¿Sabes muy poco sobre ellos?
b. ¿Haces todo lo posible para obtener una comprensión inteligente de ellos?
c. ¿Tienes una idea general de ellos, pero no les das ningún estudio?
19. Cuando regresas a casa de los cultos de la iglesia…
a. ¿Encuentras fallas en el sermón, el predicador, el coro, los ujieres, el conserje, etc.?
b. ¿Criticas a los que no se fijaron en ti?
c. ¿Tratas de recordar las cosas útiles y agradables y comentarlas?
20. Cuando escuchas algo desagradable sobre una persona…
a. ¿Le dices francamente lo que has oído?
b. ¿Lo cuentas a los demás, de forma confidencial, por supuesto?
c. ¿Lo olvidas tanto como puedes y nunca lo repites?
21. Cuando alguien te dice un secreto, pero no te pide que no lo digas…
a. ¿Lo guardas absolutamente, a menos que se trate de un delito?
b. ¿Lo repites a los que les gustaría saber?
c. ¿Le dices a aquellos que crees que deberían saber?
22. Si una persona te hiciera un gran mal…
a. ¿Lo odiarías abiertamente y lo llamarías “indignación justa”?
b. ¿Lo odiarías en secreto y lo tratarías con indiferencia si lo encuentras?
c. ¿Lo perdonas por el amor de Cristo, amándolo y orando por él?
23. Si vieras a un enemigo amargo que necesita ayuda en un accidente…
a. ¿Continuarías tu camino, solo solicitando ayuda de otros?
b. ¿Te detendrías para ayudarlo con amor y de todo corazón?
c. ¿Seguirías tu camino, fingiendo no haberlo visto?
24. En cuanto al tránsito y otras regulaciones gubernamentales…
a. ¿Obedeces cada ley lo más posible?
b. ¿Ignoras las leyes cuando no ves el sentido de obedecerlas?
c. ¿Obedeces la ley, a menos que tengas mucha prisa?
25. Si encontraras algún artículo deseable…
a. ¿Lo ocultarías y lo guardarías para ti?
b. ¿Lo anunciarías y harías todo lo posible para encontrar al propietario?
c. ¿Averiguarías si el propietario podría llegar a descubrir que lo tienes?
26. Si recibieras, por error o de otro modo, algo que no te pertenece…
a. ¿Lo guardarías, pensando que compensaría incidentes similares que no te favorecen?
b. ¿Loa guardarías y pondrías una cantidad extra en el plato de ofrenda?
c. ¿Lo devolverías por completo al propietario de una vez?
27. Si un artículo te costara cincuenta dólares y pudieras recuperar lo que pagaste…
a. ¿Cobrarías de cincuenta y uno a cincuenta y cinco dólares por ello?
b. ¿Cobrarías exactamente lo que te costó?
c. ¿Cobrarías de setenta y cinco a trescientos dólares por ello?
28. En cuanto a los discapacitados mentales o personas con otros impedimentos…
a. ¿Los evitas?
b. ¿Te sientes impaciente con ellos y te quejas de ellos con los demás?
c. ¿Los consuelas y tratas de ayudarlos?
29. Si un extraño se sentara en tu banco habitual en la iglesia…
a. ¿Dirías con firmeza: “Este asiento está reservado”?
b. ¿Le lanzarías una mirada asesina para que no repita la ofensa?
c. ¿Le darías una sonrisa de bienvenida y lo tratarías como un invitado, felizmente encontrando un asiento para ti en otro lugar si es necesario?
30. Si una persona de otra raza se sentara a tu lado…
a. ¿Expresarías molestia o desprecio?
b. ¿Cambiarías de asiento silenciosamente?
c. ¿Harías lo que Jesús haría en tu lugar?
31. Si recibieras inesperadamente cinco mil dólares para el saldo de una deuda antigua…
a. ¿Lo declararías en su totalidad y pagarías los impuestos correspondientes sobre los ingresos inesperados?
b. ¿Lo declararías de forma incorrecta de tal modo que no sea sujeto a impuestos?
c. ¿No declararías nada en absoluto?
32. Si te ofrecieran un soborno que pensaras no dañaría a nadie…
a. ¿Lo aceptarías y estarías agradecido?
b. ¿Lo rechazarías sin consideración alguna?
c. ¿Lo aceptarías y lo darías generosamente a buenas causas?
33. Si la persona que más amas muriera…
a. ¿Admitirías el derecho de Dios en el asunto y tratarías de someterte a su voluntad?
b. ¿Tendrías una crisis nerviosa provocada por el dolor?
c. ¿Aceptarías con confianza la voluntad de Dios para ti y seguirías como de costumbre?
34. Si te encuentras enamorado de un incrédulo, o incluso de un buen católico o judío ortodoxo…
a. ¿Aceptarías su fe con reservas mentales?
b. ¿Le guiarás a que se una a tu iglesia con reservas mentales?
c. ¿Pondrás fin a la atracción y confiarás en que Dios te compensará?
35. Qué es lo que más te interesa…
a. ¿Tú y tus propios asuntos?
b. ¿Otras personas y sus asuntos?
c. ¿Jesucristo y las cosas de su reino?
36. ¿Cómo te comportas en casa? …
a. ¿De forma egoísta y egocéntrica?
b. ¿Alegre, contento y agradable para los que viven contigo?
c. ¿Inquieto, lleno de quejas y regaños?
37. En cuanto a las bebidas alcohólicas…
a. ¿Participas en algunas ocasiones, pero evitas la intoxicación?
b. ¿Tomas vino o cerveza, si te daría vergüenza no participar?
c. ¿Nunca los usas bajo ninguna circunstancia?
38. Si los tiempos fueran muy duros y el único trabajo que pudieras encontrar fuera vender o servir bebidas alcohólicas…
a. ¿Lo aceptarías y orarías para que no suceda ningún daño?
b. ¿Rechazarías el trabajo y esperarías que Dios te recompense de alguna manera?
c. ¿Te sentirías obligado a aceptar el trabajo, ya que uno “tiene que vivir”?
39. Si compraras un libro caro y luego descubrieras que deshonra a Dios…
a. ¿Lo mantendrías y lo leerías, ya que has pagado un buen dinero por él?
b. ¿Lo darías como regalo a alguien?
c. ¿Lo destruirías para evitar que alguien lo lea?
40. Evita usted mismo cometer actos inmorales, pero…
a. ¿Anhelas verlos actuados o insinuados en la pantalla?
b. ¿Disfrutas leyendo la historia de ellos en revistas y libros?
c. ¿Te esfuerzas por ser puro de corazón, para glorificar a Dios?
41. Cuando oras…
a. ¿Dedicas todo el tiempo a ti mismo y a tus asuntos?
b. ¿Dedicas todo el tiempo a ti mismo, tus asuntos y tus amigos?
c. ¿Te das cuenta de que estás hablando con Dios, le agradeces y le alabas, orando para que venga su reino y por tu parte en promoverlo?
42. Cuando das un testimonio en la iglesia o en otro lugar…
a. ¿Intentas promoverte?
b. ¿Tratas solo de glorificar a Dios?
c. ¿Tratas de decir lo que se espera de ti de una manera entretenida?
43. En cuanto a las doctrinas del Nuevo Testamento…
a. ¿Crees que no son importantes?
b. ¿Tienes sólo una vaga idea de lo que son?
c. ¿Tienes una razón para la fe que hay en ti?
44. En cuanto a tus hábitos, diversiones, adornos, etc., …
a. ¿Seleccionas aquellos que crees que “no son dañinos”?
b. ¿Seleccionas los que tu iglesia no prohíbe?
c. ¿Seleccionas aquellos que piensas que Cristo seleccionaría si él estuviera acompañándote de forma visible?
45. Te consideras un cristiano separado…
a. ¿Porque eres refinado y virtuoso?
b. ¿Porque evitas hacer algo cuestionable?
c. ¿Porque estás totalmente dedicado a Dios y a su servicio?
46. Cuando te encuentras prácticamente prisionero en la medianoche de las circunstancias…
a. ¿Tienes un cántico de alegría en tu corazón, sabiendo que Dios hará que todo resulte para tu bien y su gloria?
b. ¿Murmuras, lloras y lamentas tu destino, culpando a otros si puedes?
c. ¿Te vuelves malhumorado, amargado y vengativo?
47. Cuando cantas palabras como: “Seguiré do tú me guías”, “Haz lo que quieras de mí Señor”…
a. ¿Le estás mintiendo a Dios?
b. ¿Estás realmente expresando el deseo de tu corazón hacia él?
c. ¿Estás hablando, seguro que él sabrá que no lo dices en serio?
48. Creyendo que Cristo valoraba lo suficiente a las almas perdidas como para morir por ellas…
a. ¿Estás contento solo con ser salvo tú mismo?
b. ¿De vez en cuando tratas de llevar a alguien a la iglesia contigo?
c. ¿Está constantemente haciendo todo lo que puedes para presentar a las personas a Cristo y hacer que lo amen?
49. Es Jesucristo meramente…
a. ¿La persona a la que más admiras?
b. ¿Parte de la junta directiva de tu vida?
c. ¿O es él absolutamente la Cabeza, el Controlador de todo lo que eres?
50. Cuando descubras cuán baja es tu calificación en este cuestionario…
a. ¿Lo aumentarás un poco, en caso de que se le pregunte al respecto?
b. ¿Estarás conforme, sabiendo que, si tu calificación es mala, otros serán peores?
c. ¿Harás frente a los hechos directamente, determinando cambiar las cosas de inmediato para ser un templo más adecuado para Cristo quien mora en nosotros?
Respuestas bíblicas
1. c. “Sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para ser justificados por la fe de Cristo y no por las obras de la ley, por cuanto por las obras de la ley nadie será justificado.” (Gálatas 2:16); “Nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo” (Tito 3:5).
2. c. “Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente” (Mateo 22:37).
3. b. “Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado” (Juan 17:3; también Hechos 10:43; Juan 4:14; Lucas 12:8).
4. a. “El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él” (Juan 3:36; también Gálatas 6:8; Juan 1:12, 13; Rom. 1:16; 10:9).
5. c. “En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros” (Juan 13:35; también Santiago 2:8; Mateo 22:39; Juan 15:12).
6. c. “No sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino como siervos de Cristo, de corazón haciendo la voluntad de Dios;” (Ef. 6:6; también I Tes. 4:1).
7. c. “Porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo” (II Pedro 1:21; también II Timoteo 3:16; Hebreos 1:1). I Corintios 2:13).
8. c. “Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad” (II Tim. 2:15; también Sal. 119:72; Jer. 9:23, 24; Deuteronomio 11:18-21; Colosenses 3:16).
9. a. “Bienaventurado el que tú escogieres y atrajeres a ti, Para que habite en tus atrios; Seremos saciados del bien de tu casa, De tu santo templo” (Sal. 65:4; también Juan 4:23, 24; 1 Crónicas 16:29; Salmos 27:4; 84:2).
10. c. “Sirviendo de buena voluntad, como al Señor y no a los hombres” (Efesios 6:7; también Hebreos 10:23-25; I Pedro 2:12).
11. b. “La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales” (Col. 3:16; también Sal. 95:1; I Cor. 14:15).
12. a. “No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos” (Mat. 7:21; también I Juan 2:17; I Sam. 15:22).
13. c. “El que es fiel en lo muy poco, también en lo más es fiel; y el que en lo muy poco es injusto, también en lo más es injusto” (Lucas 16:10; también Eclesiastés 9:10; Prov. 28:20).
14. c. “Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e hijos, y hermanos, y hermanas, y aun también su propia vida, no puede ser mi discípulo” (Lucas 14:26; también Mateo 10:37; 6:33).
15. b. “Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde” (Mal. 3:10; también II Cor. 9:6; Prov. 3:9, 10).
16. c. “Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura” (Marcos 16:15; también Salmos 96:3; Hechos 26:17, 18; Romanos 10:14).
17. c. “Orad sin cesar” (I Tes. 5:17); “También les refirió Jesús una parábola sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar” (Lucas 18:1; también I Crónicas 16:11; Efesios 6:18).
18. b. “Y cuando se levantaron por la mañana, salieron al desierto de Tecoa. Y mientras ellos salían, Josafat, estando en pie, dijo: Oídme, Judá y moradores de Jerusalén. Creed en Jehová vuestro Dios, y estaréis seguros; creed a sus profetas, y seréis prosperados” (II Crónicas 20:20; también Jeremías 25:4; Juan 5:39).
19. c. “No toquéis, dijo, a mis ungidos, Ni hagáis mal a mis profetas.” (I Crónicas 16:22; también Isa. 29:20, 21; Mat. 7:4; Prov. 27:19; Lucas 6:37; I Cor. 13:1-5).
20. c. “Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana” (Santiago 1:26; también Prov. 6:16, 19; 26:20; Efesios 4:31, 32).
21. a. “Trata tu causa con tu compañero, Y no descubras el secreto a otro” (Prov. 25:9, 10; también 11:13; 20:19).
22. c. “Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen;” (Mateo 5:44; también I Juan 2:11; Salmo 119:165; Mateo 6:14, 15).
23. b. “Mirad que ninguno pague a otro mal por mal; antes seguid siempre lo bueno unos para con otros, y para con todos” (I Tes. 5:15; también Éxodo 23:5; Lucas 6:27, 29; Lev. 19:18).
24. a. “Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas” (Rom. 13:1; también I Ped. 2:13; Tito 3:1).
25. b. “Y les dijo: Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee” (Lucas 12:15); “El que aborrece la avaricia alargará sus días” (Prov. 28:16; también Deut. 22:1-3).
26. c. “Entonces, habiendo pecado y ofendido, restituirá aquello que robó, o el daño de la calumnia, o el depósito que se le encomendó, o lo perdido que halló” (Lev. 6:4; también Tito 2:10; Efesios 4:28).
27. a. “Jehová, ¿quién habitará en tu tabernáculo? ¿Quién morará en tu monte santo? El que anda en integridad y hace justicia, Y habla verdad en su corazón. El que no calumnia con su lengua, Ni hace mal a su prójimo, Ni admite reproche alguno contra su vecino. Aquel a cuyos ojos el vil es menospreciado, Pero honra a los que temen a Jehová. El que aun jurando en daño suyo, no por eso cambia; Quien su dinero no dio a usura, Ni contra el inocente admitió cohecho. El que hace estas cosas, no resbalará jamás.” (Sal. 15:1-5); Jesús dijo: “No exijáis más de lo que os está ordenado” (Lucas 3:13; también Jeremías 22:13; Ezequiel 22:13; Prov. 16:8; 28:6; I Tim. 6:9).
28. c. “También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos, que alentéis a los de poco ánimo, que sostengáis a los débiles, que seáis pacientes para con todos” (I Tes. 5:14; también Rom. 15:1; Heb. 13:3).
29. c. “Como a un natural de vosotros tendréis al extranjero que more entre vosotros, y lo amarás como a ti mismo; porque extranjeros fuisteis en la tierra de Egipto. Yo Jehová vuestro Dios” (Lev. 19:34; también Rom. 12:10; Heb. 13:2; Col. 3:12).
30. c. “En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas” (Hechos 10:34); “Porque no hay diferencia entre judío y griego, pues el mismo que es Señor de todos, es rico para con todos los que le invocan” (Rom. 10:12); “Igualmente, jóvenes, estad sujetos a los ancianos; y todos, sumisos unos a otros, revestíos de humildad; porque: Dios resiste a los soberbios, Y da gracia a los humildes” (I Pedro 5:5).
31. a. “Pues dad a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios” (Lucas 20:25; también Rom. 13:1; Tito 3:1).
32. b. “No recibirás presente; porque el presente ciega a los que ven, y pervierte las palabras de los justos” (Éxodo 23:8); “El que camina en justicia y habla lo recto; el que aborrece la ganancia de violencias, el que sacude sus manos para no recibir cohecho, el que tapa sus oídos para no oír propuestas sanguinarias; el que cierra sus ojos para no ver cosa mala; éste habitará en las alturas;” (Isaías 33:15, 16; también Prov. 17:23; 24; II Crónicas 19:7).
33. c. “Sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados” (Rom. 8:28); “Yendo un poco adelante, se postró sobre su rostro, orando y diciendo: Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú” (Mat. 26:39; también Job 1:18-22).
34. c. “¿Andarán dos juntos, si no estuvieren de acuerdo?” (Amós 3:3); “No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas?” (II Corintios 6:14; también Éxodo 34:12; II Juan 9; 10).
35. c. “Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia” (Mateo 6:33; también 10:37, 39; 8:21, 22).
36. b. “Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento;” (I Tim. 6:6); “Haced todo sin murmuraciones y contiendas” (Filipenses 2:14); “Mejor es la comida de legumbres donde hay amor, Que de buey engordado donde hay odio” (Prov. 15:17).
37. c. “Bueno es no comer carne, ni beber vino, ni nada en que tu hermano tropiece, o se ofenda, o se debilite” (Rom. 14:21; también Prov. 23:20, 31; 31:5; 20:1; I Corintios 6:10).
38. b. “¡Ay del que da de beber a su prójimo! ¡Ay de ti, que le acercas tu hiel, y le embriagas para mirar su desnudez!” (Hab. 2:15; también II Cor. 6:17; Isa. 52:11, 12).
39. c. “Y dirá: Allanad, allanad; barred el camino, quitad los tropiezos del camino de mi pueblo” (Isaías 57:14); “Así que, ya no nos juzguemos más los unos a los otros, sino más bien decidid no poner tropiezo u ocasión de caer al hermano” (Rom. 14:13; también Lucas 17:1, 2).
40. c. “Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios” (Mat. 5:8; también Sal. 24:3, 4; I Tim. 5:22; 1:5).
41. c. “Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites” (Santiago 4:3); “Orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos;” (Efesios 6:18; también Mateo 6:9, 10, 13).
42. b. “Para que unánimes, a una voz, glorifiquéis al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo” (Rom. 15:6; también I Cor. 6:20; Mat. 6:33).
43. c. “Retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada, para que también pueda exhortar con sana enseñanza y convencer a los que contradicen” (Tito 1:9; también I Pedro 3:15; I Timoteo 4:13, 16; Tito 2:1, 7; II Timoteo 4:2).
44. c. “para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo . . . para que en todo tenga la preeminencia;” (Col. 1:10, 18c; también II Cor. 10:5; Mat. 16; I Tes. 5:22, 23).
45. c. “Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo, y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia … pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús” (Filipenses 3:8-14; también Lucas 14:33; 18:29, 30; Col. 3:3; Gálatas 2:20).
46. a. “Ahora, así dice Jehová, Creador tuyo, oh Jacob, y Formador tuyo, oh Israel: No temas, porque yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú. Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti. … No temas, porque yo estoy contigo; del oriente traeré tu generación, y del occidente te recogeré” (Isaías 43:1-5; también II Corintios 4:15-18; 12:9, 10; I Pedro 4:12, 13; Romanos 8:28; Apocalipsis 7:13-17).
47. b. “Ahora, pues, temed a Jehová, y servidle con integridad y en verdad; y quitad de entre vosotros los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres al otro lado del río, y en Egipto; y servid a Jehová” (Josué 24:14); “Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren” (Juan 4:24; también Salmo 89:7).
48. c. “A otros salvad, arrebatándolos del fuego; y de otros tened misericordia con temor, aborreciendo aun la ropa contaminada por su carne” (Judas 23; también Santiago 5:20; Dan. 12:3).
49. c. “Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él; … Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad” (Col. 2:6-10; también Prov. 3:5, 6; Col. 1:18; Gál. 2:20).
50. c. “Hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo; para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error, sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo” (Efesios 4:13-15; también Mateo 5:48; Hebreos 6:1).
SI TU CALIFICACIÓN ESTÁ POR DEBAJO DE 50, no estás demostrando valor para Cristo. Muchos que no pretenden seguirlo podrían estar al mismo nivel. ¡Despierta!
SI TU CALIFICACIÓN ES 50-70, estás viviendo una vida infructuosa, cuando podrías estar trayendo gran gozo a tu propio corazón y a tu Señor.
SI TU CALIFICACIÓN ES 70-80, tienes posibilidades espirituales de las cuales solo has probado. Deja que Cristo viva en ti y verás lo que sucederá.
SI TU CALIFICACIÓN ES 80-90, eres un cristiano en crecimiento. La verdadera felicidad exige una entrega completa al Cristo que mora en nosotros. ¿Lo lograrás?
SI TU CALIFICACIÓN ES HONESTAMENTE 90-96, estás brillando para Cristo, pero sigue creciendo.
SI SU CALIFICACIÓN ES 96-100, probablemente haya un error en alguna parte. Revisa todo otra vez. Nadie es perfecto, pero debemos aspirar a la perfección (Mat. 5:48).
“Si, pues, nos examinásemos a nosotros mismos, no seríamos juzgados”. I Corintios 11:31
Fuente: Revista Christian Herald, 1940
me siento privilegiado por tantas riquezas literarias de la palabra de Nuestro Señor Jesucristo en esta pagina.