Se han aplicado dos métodos diferentes de interpretación a esta parábola. Mucho depende de cómo vemos estas siete parábolas, ya sea por separado o de forma dispensacional.
I. La interpretación general, vista por separado, dice:
1. Que la harina es el mundo, algo malo, y todo igualmente malo, que necesita un principio nuevo y transformador.
2. La levadura es el evangelio, y debe estar oculta en su interior antes de que pueda efectuar cualquier cambio.
3. La mujer es la predicadora, la que esconde el evangelio en los corazones de los hombres.
4. El resultado: “todo fue leudado” (Mat. 13:33). El mundo es llenado con el Espíritu de Cristo. Como una exposición de la verdad del evangelio, todo esto es hermoso y puede ser muy bendecido. Pero como una exposición de la parábola, puede ser muy defectuoso.
II. Las dificultades en la forma de aceptar este punto de vista.
1. Cambia el uso bíblico de la harina y la levadura. Hace que la harina sea mala y la levadura buena. En las otras partes de las Escrituras, la harina es buena y la levadura es mala.
2. La harina es muy favorable para la levadura, mientras que el mundo se opone por siempre al Espíritu del evangelio de Cristo,
3. Su ocultamiento sugiere algo secreto y astuto, un pensamiento que nunca se asocia con la predicación de la Palabra, sino que está estrechamente relacionado con la obra de Satanás, quien sembró la cizaña “mientras dormían los hombres” (Mat. 13:25).
4. La manera en que funciona la levadura es más sugerente de pecado que de gracia. Se mezcla con la harina, y opera gradualmente por la ley del contagio. No vemos a los pecadores convertidos de esta manera. La gracia no corre por la sangre. No vemos calles, ciudades y ciudades enteras fermentadas con el Espíritu de Jesús.
5. El propósito de la levadura también sugiere la idea de hacer que la harina, o el pan, sea más aceptable para el hombre. El gran propósito del evangelio es hacer que los hombres sean más favorables a Dios.
III. La otra interpretación considera que el reino en esta parábola se encuentra en un estado de mayor desarrollo en el transcurso del tiempo, y puede representar las cosas como son prácticamente en nuestros días. Quienes lo miran de esta manera ven:
1. La levadura, como una cosa buena que se ha contaminado; como la verdad de Dios, pervertida por la sabiduría carnal de los hombres.
2. La harina, como algo bueno que ha sido corrompido por la levadura de la enseñanza falsa. Como la harina es muy susceptible a la levadura, puede representar la cristiandad profesante siendo corrompida por doctrinas que no son de Dios. Este proceso de corrupción sí funciona como levadura.
3. La mujer que escondió la levadura en la harina, como es típico de aquellos que son reconocidos como maestros religiosos. Era el trabajo de la mujer esconder la levadura en la harina. Su negocio es esconder, de promulgar cosas contrarias a Cristo mientras actúan como siervos de Cristo.
4. El resultado. “Todo fue leudado” (Mat. 13:33). Aquí ven la corrupción universal del cristianismo como tal—una iglesia que se ha vuelto infiel y, por lo tanto, inadecuada para el uso del Señor; una iglesia que dice que “de ninguna cosa tengo necesidad,” mientras que Jesucristo está afuera (Ap. 3:17-20).
Estoy buscando una interpretación de esta parábola y no todos concuerdan, Acá, veo las distintas interpretaciones de una vez, y me llamo la atención. Así que agradezco que me hayan sacado tremendo peso, pues, todo me cierra.
Agradezco este comentario. Esta sencillo y claro.
Debemos tomar en cuenta los pasajes paralelos sobre la levadura en primer lugar aquellos dónde el mismo Señor Jesucristo habla sobre la levadura, la levadura es símbolo de pecado, corrupción, recordemos cuando el Señor llama levadura las enseñanzas de los saduceos, fariseos y hermanos.