1. Una iglesia en que haya fe, amor y esperanza
Acordándonos sin cesar delante del Dios y Padre nuestro de la obra de vuestra fe, del trabajo de vuestro amor y de vuestra constancia en la esperanza en nuestro Señor Jesucristo. (1 Tes. 1:3)
2. Una iglesia elegida compuesta por miembros elegidos por Dios
Porque conocemos, hermanos amados de Dios, vuestra elección. (1 Tes. 1:4)
3. Una iglesia que tenga el evangelio en potencia y plenitud
Pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en poder, en el Espíritu Santo y en plena certidumbre, como bien sabéis cuáles fuimos entre vosotros por amor de vosotros. (1 Tes. 1:5)
4. Una iglesia que sea ejemplo para todos los creyentes
Y vosotros vinisteis a ser imitadores de nosotros y del Señor, recibiendo la palabra en medio de gran tribulación, con gozo del Espíritu Santo, de tal manera que habéis sido ejemplo a todos los de Macedonia y de Acaya que han creído. (1 Tes. 1:6-7)
5. Una iglesia misionera
Porque partiendo de vosotros ha sido divulgada la palabra del Señor, no sólo en Macedonia y Acaya, sino que también en todo lugar vuestra fe en Dios se ha extendido, de modo que nosotros no tenemos necesidad de hablar nada; (1 Tes. 1:8)
6. Una iglesia que todos comprendan que está formada por miembros convertidos que desean servir a Dios
Porque ellos mismos cuentan de nosotros la manera en que nos recibisteis, y cómo os convertisteis de los ídolos a Dios, para servir al Dios vivo y verdadero. (1 Tes. 1:9)
7. Una iglesia que se diga que sirve al Dios vivo
Porque ellos mismos cuentan de nosotros la manera en que nos recibisteis, y cómo os convertisteis de los ídolos a Dios, para servir al Dios vivo y verdadero. (1 Tes. 1:9)
8. Una iglesia que espera la segunda venida de Cristo
Y esperar de los cielos a su Hijo, al cual resucitó de los muertos, a Jesús, quien nos libra de la ira venidera. (1 Tes. 1:10)
Adaptado de un bosquejo en La Voz Bautista del siglo pasado
Gloria a Dios por ejemplar trabajo mil Bendiciones