Archivo midi
Roca de la eternidad, fuiste abierta para mí
Sé mi escondedero fiel, solo encuentro paz en ti
Rico limpio manantial, en el cual lavado fui.
Aunque fuese siempre fiel, aunque llore sin cesar
Del pecado no podré, justificación lograr,
Solo en ti teniendo fe, deuda tal podré pagar.
Mientras haya de vivir, y al instante de expirar,
Cuando vaya a responder en tu augusto tribunal,
Sé mi escondedero fiel, roca de la eternidad.
La historia detrás del himno
Uno de los himnos más conocidos universalmente y que entre los cristianos latinoamericanos ha alcanzado un grado de popularidad difícilmente superado, es «Roca de la Eternidad». Se publicó por primera vez en Inglaterra en 1775 y su autor, quien murió tres años después, alcanzó a escuchar de los propios labios del pueblo donde vivía, la melodía que ya para entonces se había familiarizado en todas las comunidades cristianas de esa comarca.
Una experiencia inolvidable y grandemente inspiradora en la vida de Augustus Montague Toplady hizo que brotaran casi espontáneamente, las expresiones más sobresalientes de este himno, que más quietamente arreglara después, en un poema de gran belleza en su idioma original. He aquí como se relata esta hermosa experiencia del autor de «Roca de la Eternidad».
Joven aún y saboreando los frescos recuerdos de su reciente conversión al Señor Jesucristo, acostumbraba realizar largos paseos a la orilla dé las accidentadas costas de su hermosa Inglaterra. En una de esas prolongadas caminatas, lejos de su hogar, le sorprendió una fuerte tempestad, que lo obligó a procurarse el refugio más a la mano que le librara de la furia de los elementos; pero no encontraba ningún techo o asilo donde guarecerse, hasta que apareció ante su vista una escondida grieta abierta en la roca de granito del acantilado cercano y allí corrió a refugiarse. Al momento, una sensación de seguridad le sobrecogió y, mientras observaba la tempestad, brotaban de su mente esas dulces palabras que los cristianos cantan con gran confianza: Roca de la eternidad, fuiste abierta para mí…
Augustus M. Toplady se había convertido pocos años antes en Irlanda, en cuya capital cursaba sus estudios universitarios. Al visitar a su madre en unas vacaciones, escuchó que en un granero cercano a aquella granja, unos campesinos entonaban melodías religiosas. Su curiosidad le llevó a escuchar a un hombre de aspecto rudo y de palabras sencillas, quien en ese momento dirigía un mensaje basado en Efesios 2:13, «Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido hechos cercanos por la sangre de Cristo». Fue éste el toque que impresionó su corazón y cambió su vida. Poco tiempo después, Toplady escribía acerca de su conversión: «Fue extraño que viniera a encontrar a Dios en un lugar tan oscuro de Irlanda, en medio de un puñado de rústicos granjeros y precisamente de labios de un siervo de Dios que apenas podía escribir su nombre. No cabe duda que era el llamado de Dios y, ¡qué maravilloso! no podía ser obra de hombre; era incuestionablemente de parte de Dios».
A la edad de 38 años, en 1778, arribó Augustus M. Toplady al refugio seguro de los cristianos, al seno del Señor, cuya confianza le inspiró en vida los hermosos versos de su himno.
este himno aunq muy pequeño muy lindo Cristo es mi roca fuerte
SIN DUDA ALGUNA ESTE HIMNO ES UNA VERDADERA JOYA DEL EVANGELIO «ROCA DE LA ETERNIDAD» QUE MAGNIFICA INSPIRACION.Y QUE GRAN LEGADO DE ESTOS HOMBRES INSPIRADOS POR DIOS. GRACIAS POR PUBLICARLOS …SERIA BUENO TENER LA PARTITURA. CORDIALMENTE,ESTE SERVIDOR
bendiciones para quien ase posible esta comunicación y. este himno que cuando yo asistía a la iglesia bautista de la fe de las crusitas calvillo ags. mexico. lo cantábamos con mucho respeto y reverencia. busco a mi pastor marvin tobin.
La honra la gloria y la adoracion sean para Nuestro Señor Jesucristo.
Desde muy niño oía este precioso himno en mi iglesia. Luego fueron cambiando los cánticos y dejamos de mencionar la verdadera esencia del evangelio que es la cruz redentora de Cristo. Mi esposa y yo estábamos teniendo nuestro devoción matutino; en la lectura de El Pan Diario se mencionó la historia de el autor del himno Roca de la Eternidad la cual pude corroborar con este escrito de ustedes. Que impresionante historia de comunión con el Señor tenía este autor. Volveremos a cantar estos himnos que nos llevan a recordar la esencia del evangelio. Gracias
lo cantaba con mis padres en una iglesia presbiteriana en ocosingo chiapas aunque a la verdad lo cantabamos en dialecto por que todo los hmnos estan traducidos a nuestro idioma original… saludos y bendiciones…
Un hermoso himno, uno de mis preferidos, a través de sus letras, el señor me fortaleció, cuando uno de mis hermanos,falleció, luego cinco meses después, falleció otra hermana y luego siete meses después, falleció mi madre, fué duro para mi, pero Dios me consoló atravez del himno, Roca de la eternidad, muy hermoso.