Ezequiel 22:26

Se sugiere que los padres lean este artículo a sus hijos para ayudarles en saber lo que significa cuando decimos que algo es sagrado.

Nuestro texto dice que «Sus sacerdotes violaron mi ley, y contaminaron mis santuarios; entre lo santo y lo profano no hicieron diferencia, ni distinguieron entre inmundo y limpio; y de mis días de reposo apartaron los ojos; y yo he sido profanado en medio de ellos».

Supongamos que los basureros están de paro y la gente no tiene por donde poner su basura. ¿Cómo sería si nosotros diríamos, «bueno, todos en esta calle pueden guardar su basura en la iglesia hasta que se termine el paro?» Así que, al venir a la iglesia tendrías que aguantar el olor de basura debajo de los bancos y de tus pies. Esto sería lo que significa profanar la iglesia. Sería usar la iglesia por un fin indigno en vez de un lugar sagrado. Salmo 93:5 dice «La santidad conviene a tu casa». Si algo es sagrado, significa que está puesto aparte para un fin especial. El edificio de una iglesia está puesto aparte como un lugar para predicar y enseñar la Palabra de Dios. El de venir a la iglesia y tirar su basura sobre el piso o escribir leyendas y malas palabras en la pared sería profanar la iglesia. Profanar significa quitar la dignidad de algo. Es hacer algo común o vulgar. Una iglesia es más que un edificio. Es compuesta de los que la asisten. Siendo que es así, el de criticar a alguien que asiste a la iglesia es dañarle y, a su vez, dañar el testimonio de la iglesia.

Cuando tu llamas a alguien con una mala palabra estás profanándole. Es posible profanar a Dios también. En nuestro texto Dios dice que los sacerdotes contaminaron sus santuarios y, al fin del versículo él dice; «y yo he sido profanado en medio de ellos».

Si una familia está de visita en tu casa y un hijo de la familia se mete en tu habitación y tira a todas tus cosas en el piso y rompe algunos de tus juguetes, vas a estar enojado, ¿no es cierto? Bueno, tu puedes hacer lo mismo si vas a la casa de Dios y no respetas las cosas de Dios. Puede ser que vayas a la iglesia y hables malas palabras y des golpes a los demás chicos. Estás profanando a la casa de Dios.

Hay otras cosas sagradas también. La Biblia se llama «La Santa Biblia». Es un libro sagrado. Abusarla es profanarla. Distraer la atención de algunos mientras que el pastor o la maestra está enseñando la Biblia es profanarla. Lo mismo pasa si usted se ríes o hablas mientras que otro está leyendo la Biblia. En realidad estás diciendo que la Biblia carece de importancia.

La oración también es algo sagrado. Es por eso que no damos permiso a algunos chicos a asistir la reunión de oración. El orar es hablar con Dios. Algunos niños no saben respetar lo sagrado que es la oración.

Nuestro texto dice también que los sacerdotes no sabían distinguir entre lo inmundo y lo limpio. Lo inmundo es lo impuro o repugnante. Es por eso que tienes que bañarte y ponerte ropa limpio antes de asistir a la iglesia. Por supuesto, nos ensuciamos y se ensucia la ropa también pero, siendo que la iglesia es un lugar sagrado, tenemos que vestirnos de una manera apropiado si vamos allá. Tienes que distinguir entre un circo y una reunión en la iglesia. Uno va al circo para reírse y ser entretenido. Al contrario, vamos a la iglesia para aprender más sobre las cosas de Dios y para adorarle. Si tu usas una buena blusa de tu mamá como un trapo de piso, es casi seguro que ella va a enseñarte a distinguir entre lo común y lo limpio.

Si tu profanas la casa de Dios, tal vez algunos ignorantes van a reírse pero otros van a tener ganas de llorar al pensar que tu estás tan ignorante o malvado que no sabes respetar las cosas sagradas. Si amas a Dios, a su vez, vas a amar las cosas de Dios. Tal vez tu no amas a Dios porque no has aceptado a Cristo como tu Salvador. Hoy mismo puede ser el día de tu salvación.