En la vida hay muchas desilusiones. Una desilusion es la pérdida de una ilusión. Según el diccionario, una ilusión es el “error de los sentimientos o del entendimiento que nos hace tomar las apariencias por realidades”. Una desilusión es lo que sucede cuando lo que esperamos fracasa en materializarse.
Muy a menudo nuestras desilusiones son por culpa de los cuales confiamos. Muchos han sido desamparados por uno que, supuestamente, era su amante. Es común escuchar de gente que trabajaron y fueron defraudados de su sueldo. Muchos han comprado un auto porque dijeron que estaba en buena condición mecánica, pero no fue así.
Debemos practicar las palabras de Jesús cuando dijo “Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas”. Es doloroso estar desilusionado, pero peor todavía es desilusionar a otro. Hay los que ven en usted una persona de confianza. Tenga cuidado de no traicionar su confianza. Por una pequeña mentira o por robar algo de poco valor podemos perder la confianza de un compañero.
A veces somos una desilusión sin querer. Puede ser que alguien espera de usted lo que no es capaz de hacer o lo que no tiene intención de hacer. La Biblia habla de una ocasión cuando aun los mismos discípulos de Jesús fueron desilusionados por él. Se trata de los discípulos que iban caminando a Emaús algunos pocos días después de la crucifixión de Jesús. Resulta que Jesús apareció a ellos en el camino. Ellos no le reconocieron. Jesús les preguntó “¿por qué están tan tristes?” Entre otras cosas, ellos le dijeron “Pero nosotros esperábamos que él era el que había de redimir a Israel; y ahora, además de todo esto, hoy es ya el tercer día que esto ha acontecido” Lucas 24:21. No era la intención de Jesús redimir a Israel del poder de Roma.
La desilusión nos deja con poca confianza en los demás. El que fue desamparado por un amante encuentra dificultades en entregar su corazón a otro. Hombres que fueron defraudados en su sueldo no tienen ganas de salir y buscar otro trabajo. La desilusión es una experiencia dolorosa que queremos evitar.
Debemos tomar precauciones para no estar desilusionados. Debemos tener cuidado en quien ponemos nuestra confianza. Salmo 40:4 dice, “Bienaventurado el hombre que puso en Jehová su confianza, Y no mira a los soberbios, ni a los que se desvían tras la mentira”. A veces, para no ser mal entendido, es prudente hacer un contrato. Busca consejo de otros antes de comprometerte. Hay los que tienen lo que se llama “un sexto sentido” y son capaces de discernir a los que no son dignos de confianza.
Nos da estabilidad cuando estamos rodeados por algunos de confianza. No traicione la confianza de sus amigos y seres queridos. Así puede confiar que ellos no le van a desilusionar. Con todo, debemos poner nuestra confianza en Dios. El ha prometido, “no te desampararé ni te dejaré” (Hebreos 13:5).
Estos estudios que he encontrado de ud. han sido de bendicion para mi, gracias Dios por poner un gran hombre en la brecha de mi camino..Dios le recompense con la corona que el ha prometido a todos los que le sirven haciendo su voluntad…nuestro buen Dios este con ud. y con todos los que le buscan