El evangelista Sam Jones censuró, «Lo que está socavando la vida de la iglesia es la mundanalidad que está barriendo con los hogares de nuestro país». El escosés William Burns, quien estuviera relacionado con el avivamiento escocés en 1839 se refirió a la «búsqueda de la santidad personal» como el «requisito fundamental para un ministerio exitoso». Andrew Bonar señaló, «Dios trabaja mayormente a través de instrumentos puros». Robert Murray McCheyne dijo, «Un ministro santo es una arma formidable en las manos de Dios». C. H. Spurgeon reivindicó, «En cualquier ‘llamado’ que el hombre pretenda tener, si no ha sido llamado a la santidad, ciertamente no ha sido llamado al ministerio».
Estos predicadores de antaño creían en la importancia de la santidad tradicional. Hoy en día, en contraste, muchos predicadores y, por tanto, muchos cristianos minimizan la santidad personal y la rebajan. Aunque supuestamente se mantiene el principio de la santidad personal, los agentes exteriores que contribuyen a ella son tan difusos que nublan cualquier aplicación honesta.
¿Qué es la santidad personal? ¿Explica la Biblia cómo aplicar la santidad personal? ¿Es importante? ¿Aplica hoy día la santidad personal?
1 Pedro 1:14-16 dice:
Como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia; sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir; porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo. Este pasaje revela claramente que la santidad personal sí aplica hoy en día. Pero, ¿qué es santidad? La palabra usada en nuestro texto significa «separar, marcado». El versículo 16 hace referencia a Levítico. El nombre hebreo significa «separación» y el verbo significa «poner aparte». Por lo tanto, la «separación» no es otro concepto adicional a la «santidad»; ¡separación es santidad! La separación es tanto positiva como negativa. Positivamente, debemos estar separados para Dios; negativamente, debemos estar separados de lo que no es santo (Levítico 20:26). Las Escrituras dan a la santidad dos direcciones de aplicación: santidad eclesiástica y santidad personal. 1 Pedro 1:14-16 enfatiza la santidad personal que es la separación del mundo.
¿Explica el pasaje cómo aplicar la santidad personal? Note el versículo 14 que dice, «no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia». El término «conforméis» es el mismo que se usa en Romanos 12:2, «No os conforméis a este siglo». La palabra significa «dar forma o moldear de acuerdo a algo. El verbo indica la adopción o imitación de una postura o un modo de conducta recibido». Somos mandados a no seguir ni la forma ni el molde del mundo. Ciertamente las formas mundanas marcan su propio paso. Los creyentes no se deben conformar a ellas. Recuerde que este mandamiento en Romanos 12:2 sigue a la súplica del versículo 1: «Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional».
1 Pedro 1:15 nos manda a ser santos, y explícitamente explica cómo aplicar la santidad: «sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir». El término «manera de vivir» significa «conducta, comportamiento». El concepto encierra el estilo de vida. Entonces, ¿cómo vamos a aplicar la santidad? La respuesta es clara: en todo estilo de vida. Un estilo de vida incluye la música, la moda, los pasatiempos, etc. ¿Nuestro estilo de vida revela claramente nuestra separación del mundo para Dios? El decir que creemos en la santidad personal pero vivir tan cerca del mundo que empaña una separación clara es deshonesto.
¿Es la santidad personal importante? Sí, de acuerdo a 1 Pedro 1:16 la razón del mandamiento es que Dios es santo. Dios es único. Él está separado totalmente de todo pecado. Nosotros tenemos que ser como él por su gracia.
También, aunque la Escritura señala la separación eclesiástica de una manera clara, debe notarse que el término «santo» en sí mismo sea aplicado a la santidad personal en el mandamiento de 1 Pedro 1:14-16. Evidentemente, el Espíritu Santo considera la santidad personal importante.
Dios nos manda que seamos santos porque él es santo. Dios desea usarnos, pero él demanda instrumentos limpios. La Escritura describe la santidad como algo básico y que debe estar presente muy temprano en el progreso hacia la madurez espiritual. Por tanto, la santidad no hace a uno espiritual; más bien, abre la puerta para que uno pueda obtener madurez espiritual. La importancia de la santidad descansa en ser requisito para ser utilizado espiritualmente por Dios. Como dijera Andrew Bonar, «Dios trabaja mayormente a través de instrumentos santos». Los santos del Antiguo Testamento como Moisés, Josué e Isaías tuvieron que responder correctamente a la santidad de Dios antes de que Dios los usara grandemente. Por ejemplo, cuando Dios mandó a Josué que se sacara el calzado de sus pies porque la tierra que pisaba era santa, él tuvo que obedecer antes de que Dios le diera los planes de la batalla contra Jericó.
Aunque la separación del mundo parezca ser anticuada para muchos cristianos modernos, todavía aplica hoy. Tenemos que ser sabios en las Escrituras y audaces en el Espíritu para saber y aplicar la santidad personal. Pero, tenemos que aplicarla. ¡Oh, ser conformados a la imagen del Hijo de Dios! Conformarse a Dios significa no conformarse al mundo. Horacio Bonar lo resume muy bien en las siguientes palabras: «La santidad es el ser semejante a Dios, a él que es el Santo de Israel, a él a quien glorifican en el cielo, como ‘Santo, santo, santo’ (Ap. 4:8). Es el ser semejante a Cristo, al ‘Santo Ser’ que nació de la virgen, a él que era ‘santo, inocente, sin mancha, apartado de los pecadores.’ (Heb. 7:26). No es solamente separarse de la maldad y de un mundo malvado; sino que es separarse para Dios y su servicio».
–El Escudo de la Fe
muy atinente el resumen de la santidad,ya que ayuda a edificar a las personas que investigamos sobre el tema.El texto es claro conciso y concreto
lo felicito.
Buenisimooo!
Muy edificante y alentador
A velar por nuestra santidad personal hermanos
Bendiciones :)
Estos estudios sobre la santidad personal son muy interesantes para crecer espiritualmente porqué aprendemos a depender de Dios y apartarnos del pecado que abunda en nuestras vidas